Poema dedicado a Yolanda Cortés

Maestra, compañera, Amiga.

Tu vida que inició un 3 de Agosto hoy la celebramos con cariño,
todos los días recordamos con alegría tus experiencias
jocosas y siempre están en nuestras bocas.
Como cuando tropezabas con tu bastón un bulto y le decías,
con permiso señor, para después estallar en risa
al percatarte que no era tal señor.
Todos esos momentos especiales que contigo compartimos,
llenaron de contento nuestro espíritu
porque tú nos enseñaste a experimentar un mundo de bultos y sombras,
a encontrar lo positivo en la desventura de tu enfermedad visual,
a tener siempre ánimo y despertar con una sonrisa y la mejor disposición
para salir adelante en la vida.
Tus hermosos ojos azules tan vivos, pícaros y atentos, que seguían al
hablante siempre crearon perspicacia, por lo cual constantemente te
decía: Yolanda no nos engañes, estás viendo.
Hoy estamos seguros que desde el azul profundo de tus ojos
que están en el cielo, sí nos estás viendo y desde allí bendiciendo.
En este mes especial celebramos tu nacimiento,
tu crecimiento personal y profesional
la dicha que tuvimos al haber podido compartir contigo
en el CAIDV y poder decir aprendimos contigo.
Gracias Amiga!
Autora Yaya.